¿Qué es la imprimación?

Si nunca ha oído hablar de la imprimación para plásticos, se trata simplemente de la aplicación de un promotor de adherencia cuyo objetivo principal es maximizar la adherencia de las siguientes capas de pintura, incluidas las masillas y las pinturas de relleno, entre otras.

Estas capas de pintura tienen un mejor anclaje sobre el objeto (en este ejemplo, los plásticos) debido a la aplicación de la imprimación, lo que evita que se rompan o separen de la superficie como resultado de impactos, fricción o vibraciones.

Ahora bien, las siguientes acciones son las más adecuadas para realizar esta actividad:

  • Identifique el tipo de plástico. Es típico que el tipo de plástico utilizado se especifique con un código, por lo que debe determinar si este código es compatible con la capacidad del aparejo que pretende utilizar.
  • Limpie a fondo. Para maximizar la adherencia del plástico, la pieza debe desengrasarse adecuadamente y, posteriormente, limpie la región con agua y jabón.
  • Matice la superficie. En estas situaciones, deben utilizarse limpiadores antiestáticos para ayudar a reducir la carga estática del componente y evitar que se mezcle el polvo.

Además de seguir las instrucciones de la ficha técnica del producto para conocer las duraciones de secado o la regulación en la pistola pulverizadora, al aplicar el promotor de adherencia debe prestar atención a que el recubrimiento sea fino y uniforme en toda la superficie.

¿Por qué debe cuidar el pintado de las piezas de plástico?

La falta de adherencia es un problema que la imprimación ayuda a resolver cuando se pintan componentes de plástico. En vista de esto, puede que se pregunte por qué es tan importante tener cuidado al pintar plásticos en la carrocería.

La respuesta básica es que puede hacerse por el aspecto del coche o para añadir otras funcionalidades. Por ejemplo, es típico que la imprimación para plásticos aumente la resistencia de estas piezas al deterioro o los daños causados por agentes atmosféricos como los rayos UV o la humedad.

Además, pintar estos componentes garantiza que estén protegidos contra elementos mecánicos como la abrasión y otros agentes químicos como el combustible, los lubricantes o los detergentes.

Si no se realiza un mantenimiento de estos componentes, el coche no solamente puede tener un mal aspecto exterior, sino que los componentes pueden desgastarse más rápidamente y, con el tiempo, perder el color y el brillo que los hacían destacar.